En una entrevista con la Tribuna de la Automoción recogida por Efe, ha explicado que están negociando dentro del Grupo Volkswagen, al que pertenece la marca española, asumir la producción del citado todocamino compacto.

El Ateca, al igual que el Karoq de Skoda - con el que comparte plataforma-, se fabrica en la planta de Kvasiny de la República Checa.

Tanto la marca checa como la española están retrasando sus entregas globales por la falta de unidades, por lo que hay una "urgencia" para el directivo.

En estos momentos, hay "debates abiertos sobre si hacer el traspaso (del Ateca)", pero todo depende de si Skoda puede aumentar su capacidad de producción y de si SEAT empieza a fabricar en México, ha apuntado.

"Al final de año la decisión va a estar mucho más clara. Está en marcha un proceso interno de estrategia y de utilización de la capacidad productiva de las fábricas", según Luca de Meo.

También adelanta en la entrevista que, de la gama actual de producto, van a desaparecer cuando se acabe su ciclo productivo los modelos SEAT Mii (urbano) y Toledo (berlina compacta).

Por el contrario, a pesar de la llegada del todoterreno grande Tarraco, se mantendrá el monovolumen Alhambra, ya que ha sido "una gran sorpresa el buen funcionamiento que ha tenido desde el principio", ha dicho.

Respecto a la entrada en vigor a partir de septiembre de la nueva normativa de homologación WLTP, De Meo ha considerado que va a provocar "problemas" porque se han fijado unos plazos para hacer la adaptación "relativamente cortos".

En el Grupo Volkswagen hay "muchísimas combinaciones de modelo, motor y cambio. Tienes que rehacer la homologación y el ciclo de test es de más de 160.000 km. Es mucho trabajo y todo el mundo lo está haciendo al mismo tiempo. Nosotros dependemos de lo que hacen en Alemania. La capacidad de test está saturada", ha concluido.