El nuevo T-Cross, cuyo prototipo fue presentado en el Salón del Automóvil de Ginebra de 2016, ya está preparado para iniciar su fase de producción, estará asociado a una tracción delantera y tendrá una longitud de 4,107 metros.

Asimismo, el T-Cross estará basado en la plataforma modular transversal (MQB) y contará son asientos traseros que se pueden ajustar de manera longitudinal, lo que permitirá obtener más espacio para las piernas o para el equipaje, ha detallado Volkswagen.

El nuevo SUV pequeño de la marca alemana tendrá un "gran número" de sistemas de asistencia a la conducción, entre los que se incluye el sistema de monitorización del entorno y el de mantenimiento de carril.

Habrá que esperar a las próximas semanas para ir conociendo más detalles de este nuevo competidor del segmento SUV más pequeño, en el que la práctica totalidad de marcas del mercado cuenta ya con su ejemplar.