Establecer en Brasil una base de producción para el Prius (serÃa la cuarta después de las que existen ya en Japón, China y Tailandia) le permitirÃa al fabricante nipón rebajar el cuantioso gravamen que Brasilia impone sobre los vehÃculos importados.
Esto abaratarÃa el precio de venta al público del modelo hÃbrido (que cuesta el doble en Brasil que en Japón) y facilitarÃa la penetración en el paÃs sudamericano del Prius, del que apenas se han comercializado 400 unidades desde que salió a la venta en enero de 2013.
Aunque oficialmente Toyota no ha querido hacer ningún comentario, una fuente de la empresa explicó a Nikkei que la subsidiaria del fabricante de Aichi está negociando ciertas condiciones con el Gobierno federal y con las autoridades del estado de Sao Paulo antes de anunciar oficialmente los detalles de su plan de producción.
En cualquier caso, la idea básica serÃa utilizar la fábrica que Toyota tiene en Sao Bernardo do Campo, al sur de la ciudad de Sao Paulo, para el ensamblaje final de unas 1.500 unidades de Prius al año, según explicó la fuente.
Para ello, Toyota desplazarÃa de esta fábrica a Argentina parte de la cadena de montaje de su "pickup" Hilux.
Desde que fue lanzado en 1997, el Prius es el modelo abanderado de los coches hÃbridos -que combinan un motor eléctrico y uno de gasolina y por ello contaminan menos- y desde entonces ha penetrado con fuerza en mercados como Norteamérica, Japón, Europa o China.
Toyota confÃa en que lo haga también en Brasil a medio-largo plazo, a medida que las autoridades locales impongan criterios de emisiones más estrictos y aumente la concienciación medioambiental entre los conductores.
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