Acudimos a la invitación formulada por el comité organizador de la Copa Adam Disamax para comprobar in situ, en el circuito de Maspalomas, las características principales del pequeño vehículo y su fase de desarrollo a la alta competición.

Para sugerir y poner a prueba la mecánica, la organización invitó a tres reconocidos pilotos para que aportaran su punto de vista sobre el Adam de competición. Nosotros pudimos conocer de primera mano las opiniones de José María Ponce, quien nos comentaba las "bondades del chasis, muy noble pero efectivo. Quizás el punto flaco en carretera esté en el desarrollo tan largo de un cambio de serie, con lo que se hace imprescindible acortarlo de alguna manera. De otra forma, en pocas ocasiones podrá insertarse siquiera la cuarta marcha."

El experimentado piloto grancanario añadió que "quitando el servofreno se ganaría en confianza en la frenada y es algo que no cuesta absolutamente nada."

Los otros pilotos invitados fueron Vicente Bolaños y Angel Marrero, quienes apuntaron que les ha "sorprendido el coche, pues tiene bastante potencia para el motor que lleva, el cambio por lo menos en el circuito y el incorporar el autoblocante creo que ha sido un acierto. Los frenos nos han sorprendido gratamente, lo único quizás quitarle el servofreno para conseguir un mejor tacto. Las reacciones en el trazado del circuito son muy bruscas, con frenadas muy grandes, con apoyos muy largos y el coche balanceaba, lo justo para ayudarte en las trazadas”.

A excepción de la fatiga en los frenos, el resto funcionó como estaba previsto y demostró una excelente fiabilidad de base. A finales de este año se conocerán los pilotos que participarán en la primera edición de la Copa Adam Disamax.