Ambos quisieron volver a sentirse pilotos y estrechar lazos. Manuel Aviñó, con una trayectoria de 30 años en competición, más ligada a los rallys, disfrutó mucho la experiencia y pudo vivir de nuevo la competición en circuito. La actuación de ambos fue más que brillante y acabaron en la undécima posición de la clasificación, un resultado sensacional teniendo en cuenta su falta de entrenamiento.

La idea de hacer algo juntos partió en la reciente visita del nuevo presidente de la RFEdA a Portugal, donde se encontró con otro piloto al frente de la federación portuguesa. Poco después, SEAT les ofreció la posibilidad de correr juntos con el León Cup Racer y todo se materializó con la asistencia del equipo Baporo Motorsport.

“Ha sido un fin de semana inolvidable. Me he sentido como uno más en la parrilla, y la experiencia me ha servido para escuchar a mucha gente y trabajar. Quiero ser un presidente que está en la misma línea que los pilotos”, declaró Manuel Aviñó al analizar el fin de semana en Valencia.

“El coche es maravilloso, tiene mucho par, un paso por curva muy rápido y tiene su punto técnico de conducción. Es un coche equilibrado en precio y prestaciones. Su coste por kilómetro es reducido y esto es muy interesante para los equipos y los pilotos”, ha concluido Manuel Aviñó, que proyecta alguna carrera esporádica en pruebas de tierra o montaña para tener conocimiento de primera mano de todas las especialidades.