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La V edición del Salón Internacional del Vehículo Clásico de Madrid, celebrada del 21 al 23 de febrero, fue visitada por 38.000 personas, han informado hoy los organizadores, que han destacado que esta cifra es similar a la de anteriores años y consolida esta cita como la mayor exposición de clásicos del país.
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En esta ocasión se ha dado un protagonismo especial a los vehículos que han lucido el sello "Hecho en España", caso de los Renault 4L y R7, el Seat Ibiza y el Simca 1000.
El 4L, fabricado íntegramente en la factoría de Valladolid, celebró el 50 aniversario del inicio de su comercialización en España; y el R7 su 40 cumpleaños.
Medio siglo también suma el Simca 1000, que fabricó en España Barreiros y del que se exhibió una unidad exclusiva: la versión descapotable que se hizo para los visitantes ilustres a la fábrica.
Seat también aprovechó el salón para festejar los tres años de su Ibiza, del que mostró el primer ejemplar de la saga, el 1.5 GLX de 1984 con el bastidor número 1.
Junto a estos coches hechos en España también se pudo ver unidades de las marcas de coches Alfa Romeo, Mercedes y Porsche, y de la de motos Harley Davidson, entre otras.
En el caso de las dos ruedas, la representación nacional corrió a cargo de las únicas cinco Bultaco MK15 que vieron la luz en la época final de la marca, allá por los primeros años 80.
En los 20.000 metros cuadrados que ha ocupado la muestra han estado repartidos más de 300 expositores procedentes de 10 países
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